Es temporada de fútbol todo el año en México

Los hombres no lloran: El fútbol mexicano

por Mónica Belén

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Decenas, cientos de hombres sufrían al unísono, los ríos corrían por sus ojos. Tartamudeaban al intentar hablar. Babeaban por el terrible dolor. Se consolaban, se abrazaban, otros arrodillados golpeaban el suelo con rabia y miraban al cielo gritando: ¿por qué? Uno que otro, en soledad, sentado, parecía en estado de shock mirando al infinito, las lágrimas brotando de sus ojos. Sí, el sufrimiento era generalizado. De repente se oye una voz indiferente y femenina: "Hombres, no es muy machista llorar por perder un partido de fútbol".

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El juego de pelota no es nuevo en México. Los mayas (2400 a.C.), los zapotecas y los aztecas (1521 d.C.) practicaban el llamado "Juego de Pelota", que consistía en golpear con la cadera, el codo o la rodilla una pelota que pesaba casi 9 libras. La pelota estaba hecha de fibra vegetal elástica y caucho. Se introducía en una especie de anillo de piedra colocado en las paredes laterales, incluso el simple hecho de tocar el contorno del anillo daba puntos. Era la representación lúdica del triunfo de la luz sobre las tinieblas, del sol sobre la luna. no está claro si los ganadores o los perdedores eran sacrificados en honor a los dioses, sin embargo, había sacrificio de uno o varios jugadores. Con la conquista en el año 1521, este juego fue prohibido debido a su significado religioso. No fue sino hasta el año 1880, que el fútbol llegó a México de la mano de los mineros ingleses que se establecieron en el centro del país, específicamente en Hidalgo (estado minero por excelencia) donde las grandes empresas mineras explotaban la plata y otros metales. Fue allí, en 1887, donde surgió uno de los primeros equipos de fútbol. Era tan fácil de jugar, que rápidamente se hizo popular. El primer equipo de fútbol se fundó en Pachuca, capital de ese estado, en 1901. Este equipo es el más antiguo del país, sigue vigente como "LOS TUZOS DEL PACHUCA" y ha ganado varios campeonatos nacionales.

Desde entonces, la afición y los jugadores han crecido exponencialmente. Actualmente existen 5 ligas con 269 equipos inscritos, de los cuales 18 son los más emblemáticos del país: EL AMÉRICA, ATLAS, LAS CHIVAS DEL GUADALAJARA, LEÓN (actuales campeones), LOS RAYADOS DEL MONTERREY, LOS PUMAS de la Universidad Nacional Autónoma de México , LOS TIGRES de la Universidad Autónoma del estado de Nuevo León, LA MÁQUINA DE LA CRUZ AZUL, LOS DIABLOS ROJOS DE TOLUCA (les dejo la tarea de averiguar el significado de sus nombres) entre otros y todos ellos con sus estadios. Prácticamente todos los estados del país tienen un equipo de fútbol en 1ª o 2ª división.

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Hablar de fútbol es como hablar de religión o de preferencias profundas. Cuando dices que eres fanático de uno u otro equipo, la gente te clasifica. El equipo con más seguidores en México es LAS CHIVAS DEL GUADALAJARA. Seguido por LAS ÁGUILAS DEL AMÉRICA, estos dos equipos son rivales por naturaleza, tienen partidos memorables y aglomeraciones que terminan en trifulcas o gran fiesta nacional. Hay un dicho "tener la camiseta puesta" que es alusivo al fútbol y se refiere a la lealtad que se puede tener hacia alguien o algo, en este caso al equipo. Los ánimos se mueven por decenas en todo el país apoyando a su equipo, ¡y no están patrocinados! Es tanto el fervor y la pasión que se genera que familias enteras llegan en caravana de un extremo a otro del país. Se organizan a nivel nacional, se disfrazan, tienen precios preferenciales en los partidos y lugares especiales en los estadios.

El estadio de fútbol más famoso de México es EL ESTADIO AZTECA; está situado en el sur de la Ciudad de México y recibe el apodo de "EL COLOSO DE SANTA ÚRSULA". Tiene capacidad para 87.753 espectadores sentados, casi los 90.000 que tiene el Estadio de Wembley en Londres, frente a los 20.789 del Madison Square Garden. Este coloso mexicano ha sido testigo de los Mundiales de 1970 y ha visto cómo Pelé y 1986 se convertían en leyenda. También ha sido escenario de innumerables conciertos de grupos como U2, Michael Jackson o Elton John, entre muchos otros.

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Hombres que se convierten en dioses, son modelos a seguir para millones de personas en todo el país y el mundo. Hugo Sánchez, Rafael Márquez, Javier Hernández "El chicharito", Cuauhtémoc Blanco, Jorge Campos, entre otros. ¿Y qué decir cuando juega la Selección? Es una locura en el país y en cualquier rincón del mundo donde haya un mexicano (aunque no le guste el fútbol) en ese momento es un fanático de La Selección; , es parte de la identidad nacional portar la camiseta del equipo nacional, así como la bandera de México.

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En definitiva, por esto y por mucho más, el fútbol une y separa, produce profunda felicidad o tristeza. Es una mezcla agridulce que se traduce en euforia, en pasión absoluta. Puede no gustarte, pero nunca te dejará indiferente cuando se hable de él en México. Sí, los mexicanos también lloran, y mucho, cuando ven rodar un balón hacia la red.