Estilo de vida
Bienestar
Espirulina: El secreto mejor guardado de México
Ahora estamos contando secretos...
En el mundo de las vitaminas, hay muchos suplementos que pueden ayudar a mejorar y apoyar su salud. Hoy en día, nos bombardean con la próxima "nueva e increíble vitamina milagrosa" que resolverá todos nuestros problemas. Nos hará parecer jóvenes, sentirnos con energía y felices, y controlará nuestro apetito y estado de ánimo. Incluso vienen en un envase con tu nombre, ¿a qué mola?
Pues bien, estoy aquí para decirte que yo era esa chica. Si abrierais mi armario de vitaminas, podríais pensar que tengo la afición de coleccionarlas. Y así, mi afición cambió después de que mi médico me dijera que tenía fibromas, deficiencia de hierro y un sistema inmunológico débil. Genial, pensé, ¿por dónde empiezo? Por supuesto, mejorar mi dieta y hacer más ejercicio era parte de la búsqueda, pero necesitaba el suplemento adecuado para ayudarme a recuperar el rumbo, que encontré.
Saluda a mi mejor amiga, la espirulina. Ah, pero sí, seguro que ya has oído hablar de este "superalimento", el alga verde azulada, quizás porque la NASA la utilizó como suplemento alimenticio para sus astronautas o quizás porque las Naciones Unidas la aprobaron para luchar contra la desnutrición en África, ¡por no decir que parece que la espirulina nació mexicana!
Este no es un suplemento común, la espirulina es un alga que los aztecas solían comer todos los días como fuente de proteínas. Crece en lagos altamente alcalinos; es un potente antiinflamatorio y una dosis diaria contiene más proteínas que la carne de vacuno o cualquier planta que puedas consumir a diario. También contiene todos los aminoácidos más importantes para el ser humano, así como hierro, magnesio, calcio, betacaroteno y todas las vitaminas B.
Empecé a tomar espirulina y mi vida cambió. El año en que me operaron para extirparme los fibromas, pasé de tener un dolor insoportable, inflamación y sobrepeso a convertirme en una corredora de maratón sana, feliz e incluso de aspecto más joven. Finalmente, pude volver a quedarme embarazada. Mis fibromas nunca volvieron a aparecer, y mientras estaba embarazada, le dije a mi médico que era una consumidora de espirulina. Nunca me sugirió que dejara de hacerlo. Nunca tomé una sola vitamina prenatal durante esos 9 meses, ¡y mi bebé no salió verde! Hay un montón de estudios, investigaciones y artículos que apoyan y explican el beneficio de consumir espirulina. Tómate un minuto para investigar y decidir por ti mismo.