Y estamos en la línea de meta de nuestro maratón de vacaciones! Descubre cuál es nuestra última celebración navideña.

Señoras y señores, Su Majestad La Rosca de Reyes...

Por Mónica Belén Hernández Bennettz

Tu boca inquieta espera, llega, y ante la mirada de todos los presentes, se abre lentamente. Parece desmenuzarse en mil pedazos - sus olores te motivan de una manera que no puedes entender, su voluptuosidad es evidente, se derrite, tus ojos no pueden dejar de mirarlo y literalmente quieren comerlo todo, tus sentidos gritan su nombre. Tras una larga espera, un trozo se acerca a ti, se rompe ante ti, y entonces, las papilas gustativas se entregan a un frenesí calórico extasiado; entonces le das un mordisco, poco a poco, ¡lo devoras! Su sabor tan dulce te hace cerrar los ojos y salivar constantemente; altera tu aliento queriendo más y más. Necesitas algo caliente, sí, caliente. Por si fuera poco, alguien te da una deliciosa y ardiente taza de chocolate caliente o atole; se mezclan en tu boca y, poco a poco, se trenzan en tu lengua y pasan a otro nivel... tu estómago.

Ese trozo de pan te ha dejado satisfecho, de repente sientes algo duro y frío en tu paladar y oh sorpresa, se asoma por tus labios y todos empiezan a reír. Una voz te dice: ¡Tú eres el afortunado que pagará los tamales! Y tú, sólo tratas en vano de tragarte el muñequito, es demasiado tarde, tus amigos y familiares te tienen en la mira.

Esta es la historia que se repite cada 5 y 6 de enero en México. En cada oficina, casa, incluso escuela, la gente cercana se reúne para el llamado juego de la rosca. Se trata de un pan dulce, redondo y hueco que tradicionalmente se adorna con costras de azúcar (para mí la más deliciosa), tiras de frutas cristalizadas de plantas del desierto como higos, dátiles y el cactus mexicano llamado acitrón, que, por estar en peligro de extinción, hoy se sustituye por un dulce de cítricos llamado ate(¡delicioso!)

Pero lo realmente divertido del evento es su protagonista: el muñequito, un objeto de plástico blanco con forma de niño o bebé que se esconde en medio del pan. Luego se descubre partiendo la rebanada que le corresponde, la tradición dice que, quiera o no, el afortunado receptor se compromete a pagar los tamales de todos los presentes -incluso 1000-. Esto tiene lugar el 2 de febrero, fecha en la que se celebra la fiesta religiosa del Día de La Candelaria , en la que los católicos conmemoran la presentación del Niño Jesús en el templo. Por cierto, los tamales son una deliciosa comida prehispánica muy popular en México hecha con masa de maíz. Se acompaña o rellena con salsas de tomate, pollo o cerdo, y también hay dulces. Se cuece al vapor y se envuelve en hojas de maíz; su nombre proviene del náhuatl y significa cuidadosamente envuelto. Hablaremos de ello más adelante.

La rosca puede ser de todos los tamaños -desde la pequeña para una persona de 10 cm de diámetro- hasta la más grande del mundo. Esto ocurrió en la ciudad mexicana de Tizimín, en el sureño estado de Yucatán, donde se encuentra Cancún, zona maya. El 6 de enero de 2020 se consiguió el nuevo Récord Guinness de la rosca de reyes más larga del mundo, con 3.009,65 metros de longitud, más de tres toneladas de peso y 19.000 muñecos. Imagínese el festín del 2 de febrero, con tamales incluidos, todo ello acompañado del tradicional atole, una bebida caliente de sabor dulce, hecha también con maíz o un delicioso chocolate.

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Durante la madrugada del 6 de enero, los niños mexicanos esperan ansiosos la llegada de tres invitados legendarios: Melchor, Gaspar o Caspar y Baltazar. Según la leyenda, eran los Reyes de Persia, India y Arabia que fueron guiados por la llamada Estrella de Belén (conjunción de dos planetas Saturno y Júpiter vista recientemente el 14 de diciembre de 2020 después de 800 años). Ofrecieron sus respetos y llevaron mirra, incienso y oro como regalos al niño nacido en Belén hace 2020 años. Esta tradición fue traída desde España durante el periodo colonial (1521-1821) por los primeros evangelizadores franciscanos.

Y sí, en México, los niños escriben una carta doble y reciben un regalo doble: Papá Noel en Navidad y los Reyes Magos. Incluso hay ciudades donde se celebra un desfile monumental con carrozas. En la capital del país, en La Alameda (parque central), es tradición hacerse una foto de familia con los tres reyes magos. La rosca, los regalos ,y el muñeco son tradiciones que se niegan a diluirse en el tiempo y de alguna manera reunirse alrededor de la rosca es un excelente pretexto para estar juntos. ¡Feliz 2021!

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